Soy una persona de 70 años recién cumplidos. Nací antes del vuelo del primer satélite Sputnik y toda mi vida transcurrió en una época en que el desarrollo tecnológico se aceleró tanto que sobrepasó los límites de lo que en mi infancia era considerado ciencia ficción.
Y yo fui a la par de ese desarrollo. No soy de esas personas que niegan a priori la tecnología por que lo la entienden o se niegan a entenderla. Me maneja con soltura con celulares inteligentes, aplicaciones, computación, edición de videos, You Tube y Blogs, voy al cajero automático en lugar de cobrar mi jubilación por ventanilla y utilizo herramientas como el home banking.
Pero desde que conocí la Inteligencia Artificial se me prendieron todas las alertas. En realidad primero pensé que solo seria un entretenimiento pavote para trasnochados que no saben que hacer a altas horas de la noche. Luego comprendí que es peligrosa. Dicen que se perderán muchos puestos de trabajo, puede ser. La tecnología ha creado puestos nuevos y hay tareas que nunca puede hacer una máquina. Lo mas preocupante a mi entender es que vamos camino a perder por completo la noción de la realidad. Ya no sabremos que es cierto y que es falso y se acabaran todas las reglas sociales en un mundo donde no haya posibilidad de encontrar responsables.
Algunos me dijeron que estaba loca. Hace dos días uno de los creadores de la IA acaba de darme la razón. Están desesperados por que se dieron cuenta que han creado un Frankenstein que se les está escapando. Esos creadores de la IA piden urgentes regulaciones de su propia actividad a los gobiernos. Justo a ellos que son los primeros interesados en controlarnos y mentirnos y sojuzgarnos a través de herramientas como esta.
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